Parece que en el mundo del vino todo sea blanco o negro, sin términos medios. Y no es verdad, existe el vino rosado. Este tipo de vino está ganando popularidad en los últimos años y cada vez más personas eligen estos vinos para acompañar cenas o para tomar una copa por la tarde.
Sin embargo, existen muchos mitos que rodean este vino y que están muy alejados de la realidad. Por eso, queremos desmontar todos esos mitos sobre el vino rosado y demostrarte que elegir un vino rosado, como ÈTIM La Pausa, puede ser una excelente elección en muchos momentos.
Totalmente falso.
Muchos creen que el vino rosado, al igual que el blanco, es solo para tomar en las estaciones cálidas, pero esto no es cierto. Es un tipo de vino muy versátil que nos puede acompañar en muchos momentos del año. Además, son vinos frescos y ligeros, perfectos para acompañar platos como sushi o ensaladas que se consumen durante todo el año.
¿De verdad que piensas eso?
Este mito lo hemos escuchado muchas veces: «El vino rosado son los restos de uva blanca y negra», «Para obtener el color rosado se mezclan vino tinto y vino blanco»… ¡Pero no es cierto!
El vino rosado se hace con uvas negras, pero para obtener su color, se deja macerar menos tiempo con las pieles. Hay diferentes métodos de elaboración de vinos rosados y el nuestro es particular, tanto por su proceso de elaboración como por su color tan vibrante.
Si quieres saber cómo se elabora el ÈTIM La Pausa, te lo explicamos aquí.
Esto es como decir que todos los vinos tintos son dulces. Mentida.
Siempre se piensa que los vinos rosados son más dulces que secos, y aunque ciertamente hay de todo, la mayoría de los vinos rosados tienden más hacia lo seco que hacia lo dulce. El ÈTIM La Pausa es un vino con el punto justo de dulzura, lo que lo hace fresco y agradable, pero sin ser empalagoso.
Espero que esto no se piense de verdad.
Esto es otra cosa que escuchamos y vemos y nos causa sorpresa o preocupación.
Sabemos que antiguamente se relacionaba el color rosa con las mujeres, por lo que muchas empresas hacían campañas de marketing de vino rosado dirigidas a mujeres, insinuando que este tipo de vino estaba hecho para ellas.
Pues esto no es así, los vinos rosados son vinos que encajan en muchos momentos y ninguno de estos momentos son solo para mujeres. Así que, si eres hombre y no has probado el vino rosado por esa razón, deshazte de esa masculinidad frágil y atrévete a llevar un vino rosado a una cena. Te aseguramos que triunfarás.
No sabes lo que te estás perdiendo.
¡Qué creencia más errónea! Si piensas así, es porque no te has atrevido a maridar el vino rosado con una buena tortilla de patatas o una bandeja de sushi. Te sorprenderá la cantidad de platos con los que queda bien un vino rosado.
Aquí te dejo varios maridajes con el ÈTIM La Pausa que te sorprenderán.
Ya ves que no todo es blanco o negro, que el vino rosado tiene mucho que ofrecer y si pensabas que alguno de estos mitos era cierto, necesitas un poco más de cultura sobre el vino rosado.
Aprende a disfrutar del vino, sea cual sea su color.
¡Dale el valor que el vino rosado se merece!
Si te han entrado ganas de tomarte una copa de vino rosado, no te preocupes, te lo ponemos fácil y aquí te dejamos el ÈTIM La Pausa, un vino muy especial que no te dejará indiferente.
La venta de proximidad está regulada y permite identificar a los agricultores catalanes que venden ellos mismos sus productos al público, según el Decreto 24/2013.
